Marcar la cancha para no desaparecer

«Está en Ustedes, miembros de la comunidad, cooperativas, instituciones, intendentes realizar la presión necesaria para que se hagan las cosas porque en la sociedad que vivimos ahora todos nos tenemos que hacer cargo de lo que nos compete», expresó en Porteña el Secretario de Lechería de la Nación, Alejandro Sammartino  ante la desesperación de los productores tamberos que vienen cayendo como consecuencia de las políticas nacionales acelerado por las inundaciones.

La desaparición de las pequeñas y medianas unidades tamberas en el marco del proceso político nacional, se viene acelerando por las inundaciones de diciembre y enero. En la cuenca central alrededor de 1500 pequeños y medianos tambos con alto riesgo de quiebra, y otra cantidad similar hace malabares para sostenerse. Las pequeñas y medianas industrias viven una angustiante situación por la caída de producción, mientras desde Atilra manifestaron su preocupación por la crisis que afecta a Sancor. Este panorama en los departamentos San Justo en la provincia de Córdoba, Castellano; San Cristóbal y Las Colonias en Santa Fe y Rivadavia en Santiago del Estero podría dejar a unas 20 mil personas sin trabajo en el corto plazo.

Frente a una situación extraordinaria el Secretario de Lechería de la Nación, Alejandro Sammartino sigue haciendo turismo por las zonas inundadas con el propósito de recabar información para seguir adelante con su plan concentrador puesto de manifiesto a fines del año pasado en la Cámara de Senadores de la Nación donde anticipó que entre 4 y 5 mil tambos no están en condiciones de seguir, poniendo como ejemplo la concentración de Estados Unidos. 

Los altos milimetrajes que cayeron sobre nuestra región la principal cuenca lechera de Latinoamérica favorecen las políticas concentradoras, ya que obligaron a muchos productores que vienen arrastrando una situación financiera y económica de crisis desde hace largo tiempo como consecuencia del bajo valor que perciben de la materia prima, se vieron obligados a cerrar su explotación al verse cubierto por las aguas y no contar con financiamiento para salvar su explotación, mientras que otros deben enfrentar altos costos para trasladar las vacas hacia otros campos, poniéndolos al borde de la quiebra sin que el gobierno nacional implemente programas de salvataje, actuando de la misma manera que en las inundaciones del mes de abril del año pasado que los dejó a la deriva. Algo similar ocurrió con las provincias que si bien les entregaron algún bolsón para calmar el hambre, no ofrecieron programas con soluciones de fondo.

Pareciera que el gobierno nacional solo tiene la responsabilidad de lograr la ampliación de mercados para el pequeño grupo de industrias que concentra el mayor volumen de leche del país y a su vez implementar políticas que generen mega tambos para que esas industrias se queden con el mayor volumen productivo. Esto quedó en evidencia en la reunión realizada en Porteña, junto a autoridades del gobierno de Córdoba, intendentes y entidades de la región donde expresó Sammartino sentir bronca y frustración por no poder hablar de planes y al mismo tiempo se saco el lazo de la problemática del agua por un lado señalando que es producto de los conflictos de la década anterior y al mismo tiempo aclaró que la responsabilidad de resolver la urgencia es de los gobiernos provinciales. 

Mientras que en Suardi donde realizó una reunión cerrada con los presidentes comunales se negó a recibir a los productores tamberos con  el aval de mandatarios comunales de Cambiemos, el Frente Progresista y el Justicialismo sosteniendo el funcionario nacional que la situación del agua se supera con la política de crecimiento que ellos generan siendo protagonista de los mercados internacionales y serán ayudados con la postergación de IVA e ingresos brutos, además de los créditos tomados, siendo aplaudido por los titulares comunales de todos los partidos al recibir la promesa de alguna limosna para palear la situación.

 Al alertar Atilra que se vislumbra que Sancor tiene muy seriamente comprometida su continuidad en el corto plazo y el planteo realizado por la mayor cooperativa láctea sobre la afección productiva y económica, el gobierno nacional venía manteniendo un absoluto silencio hasta que el presidente comunal de San Guillermo junto a la Cooperativa Central Unida de San Guillermo sentaron a Sammartino con los productores, donde una vez más se evidenció que al gobierno nacional solo le interesa la defensa de las industrias conocidas en el ambiente como grupo Rafaela y menos aún la permanencia del movimiento cooperativo, donde planteo como una alternativa de solución la venta al sector privado. Para el logro de este objetivo podría contar dentro del consejo de administración de Sancor con algún consejero que operaria para el cumplimiento de los objetivos del gobierno de Macri, que es concretar la frustrada desaparición de la cooperativa como ya lo intentaron hace algo más de una década al Grupo Soros.

Lo que es importante tomar de las expresiones del Secretario de Lechería es que se tienen que juntar todos, comunidad, instituciones y municipios (los pocos que no avalan esta política)para generar la presión necesaria para que se hagan las cosas que salve a los pequeños y medianos productores y a través de ella a cada uno de las comunidades de la región.

Como dijo Sammartino nos debemos juntar todos para «marcar la cancha» exigiendo al Secretario de Lechería que tiene la responsabilidad de la producción lechera implemente las necesarias políticas que eviten que unas 20 mil personas radicadas en las poblaciones de la cuenca lechera central en el corto plazo se queden sin sus fuentes de trabajo. Ese debe ser nuestro compromiso social por nosotros mismos y por cada uno de los habitantes de esta región cordobesa, santafesina y santiagueña.